Situado en el barrio del Born barcelonés, este piso de 90 m2 necesitaba urgentemente un lavado de cara y una mejor distribución.
Nada más verlo, supimos que esta vivienda de techos altos y vigas vistas era un diamante en bruto al que solo era necesario pulir para convertirlo en un espectacular apartamento, acorde con el barrio de moda en el que se encuentra. La distribución no fue fácil y dimos varias vueltas hasta conseguir la definitiva: a la derecha del recibidor, la cocina, un baño completo y un aseo y, a la izquierda, el salón comedor y dos dormitorios.
La reforma consistió en eliminar puertas innecesarias en zonas de paso y crear otras sin restarle metros al piso, dotar al salón de un comedor de invitados y renovar la cocina por completo para integrar los electrodomésticos y ampliarla con un office.
El antiguo lavadero, junto a la cocina, se convirtió en un pequeño y coqueto aseo. También se mejoró toda la instalación eléctrica y se crearon nuevos puntos de luz. En cuanto al mobiliario, se optó por un estilo nórdico con guiños vintage y algún toque industrial mezclando muebles low cost con icónicas piezas de diseño. El diamante, ya pulido, muestra ahora su mejor cara.